Lirica libre, el lugar de las letras de un escritor novel que día a día, trata de ser mejor...

Esta es la historia de un hombre que continua luchando contra su destino... Y confia en que vencera.

martes, 30 de noviembre de 2010

Retomando las letras...

Retomando las letras.


Es una tarea en vedad difícil como no me hacia una idea.
Dejar atrás algo tan emblemático como escribir y querer volver a él como si nada… es tan idiota como creer que puedes irte de viaje años, y regresar a buscar a una novia de la infancia (¡Aguas eh Leonardo!) y esperar que te siga amando.
Puede ser que dé frutos, que sirva o que se yo, pero, cuesta trabajo readaptarse a un ritmillo de vida, de estilo que dejaste atrás.
Eso me pasa a mí hoy día, he dejado de lado las letras por los juegos principalmente y no está mal. Me motivan los juegos a crea cosas geniales, a ver errores en los argumentos y no repetirlos o a darle otro enfoque a las ideas épicas. El problema es que me dejo absorber, y dejo las letras abandonadas.

Eso no está chido.

Las letras son un ejercicio exquisito que siempre será útil. Al escribir o leer amplias vocabulario, ayuda a expresarte mejor, a tener mayor repertorio de palabras, te hace mas culto y otras maravillas. Ahora ya no hablemos de la maravilla que es el saber redactar desde una lista de la tienda a un cuento. Simplemente es mágico.
Tengo muchos pendientes en mi vida, pero una prioridad que retomare poco a poco es escribir.

Hoy ya lo hice, retome del olvido “No me olvides” (precisamente), pero, en la parte de planeación. Hice un par de ajustes cronológicos, algunos bocetos de capítulos (bueno… en realidad hago “párrafos” con una idea principal y luego llego y me invento todo) y ajuste datos importantes que traía en la mente desde hace meses.
Eso es lo difícil, son un habito las letras. Tal vez no escriba, pero, siempre estoy pensando nuevas ideas de que escribir, que agregar, que inventar. Lo difícil es arrancar, descongelarme y empezar a dar marcha.

Pero, lo lograre, claro que si. Retomar las letras no es fácil, pero el esfuerzo es nada comparado a la recompensa.
Aprovechando hare oficial que ya tengo formspring

http://www.formspring.me/Kaiifan

Es una maravilla, no espero tener más cartas que santa, pero si espero tener que contestar algunas preguntas. Pueden clicar ahí o mas abajito del blog hay un apartado pa hacer las preguntas… así que denle gusto al cuerpo XD

Finalmente, estoy trabajando en proyectos como no me olvides, la pista de baile del diablo y claro, el amable y despabilador cancionero. Así que estén pendientes.
Y recuerden, comentar tal vez no ayude a salvar animales, a proteger el ambiente, a combatir el calentamiento global o a matar a algún político corrupto, pero, que chingados… es agradable leer comentarios XD

jueves, 11 de noviembre de 2010

Detras de... Cancinero.

Detrás de… Cancionero.
Y continuamos con esta parte de hacer la tarea de escribir un poco, de no olvidar el blog y de darle seguimiento a lo que podríamos llamar como apuntes de un escritor novel.

La grandiosidad de esto es que es mi blog y supuestamente puedo escribir lo que quiera, asi que hoy hablare de porque surgió la idea de crear una recopilación de mis relatos llamada cancionero.

Desde que tengo conciencia, siempre he sido un tipo que tiene ciertas habilidades, pero, que tiene mucha pereza. Recuerdo que en la primaria, vivía con mis abuelos paternos, y a mi abuelo le gusto siempre cantar y tocar la guitarra (cosas que espero de corazón todavía haga), el era partidario de esas ondas de los tríos (tres tipos tocando guitarra y cantando) y pues le gustaba mucho, por tanto le gustaba mucho a mi papá y pues a mí me parecía interesante.

El tenia muchos cancioneros, ya fuesen obtenidos por medio de su mano y esfuerzo o regalados (por ejemplo, en un cumpleaños mi papá le obsequio uno) así que, siempre hubo de eso. Y pues a mí me gustaba, siempre que mi abuelo cantaba o hablaba de las clases de guitarra, se veía animado, radiante.

Yo quería tocar, y aprendí en la secundaria por mi clase de música. Toque ligeramente bien la guitarra hasta que me dio hueva y reprobé la materia… pero recuerdo que igual cantábamos y tocábamos varias melodías, como por ejemplo la clásica y mexicanísima “Adelita”. Y esta clase me remitía también a los cancioneros, esos recopilatorios mágicos de esas melodías que llegaron para quedarse.

En la preparatoria escribía muchos ensayos para diversas tareas y materias, y me era sumamente fácil porque me gustaba escribir (yo lo hago desde la secundaria, y vaya que he mejorado eh) y porque solo se trataba de dar mi opinión, así que era muy fácil.

Después, me llamo la atención el crear historias, el permear a las letras de mis propias ideas pero a un nivel más creativo y no solo divulgativo, quería hacerlo enserio, quería crear algo grande, que llegara para quedarse.

Mi fuerte siempre han sido (supongo que a raíz de los ensayos y crónicas, sobre todo lo ultimo) las historias de un corte mas real, ambientadas en una urbana y colorida como mi amado D.F. y demás. Así que escribía, y escribía relatos de amor, aventuras de chicos de secundaria, y algún entretenimiento de historias de guerreros solitarios, espadachines malditos y demás.

Todo estaba desperdigado en el disco duro de la computadora de escritorio de mi papá. Al contrario de otros padres que seguro desalentarían los sueños más bobalicones de sus hijos, mi papá me orillaba a escribir, me daba pautas, me daba ideas (que hasta la fecha no uso XD) me daba instrucciones para hacerlo mejor, me decía que había X curso de X cosa como redacción, ortografía y demás…el estaba apoyándome.

Tanto así, que cuando se llegaba a llenar de virus la computadora y requeríamos hacer un respaldo, mi papá respaldaba todos sus documentos, y en discos aparte, los míos.

No sabría como agradecer a mi padre todo esto, que sin querer a influido rotundamente en mi.

Entonces, en esas épocas decidí que era momento de hacer de menos, una carpeta especial para cada tipo de relato (divididos en obras grandes o pequeñas, y a su vez cada cual con sus diversos apartados), ya se lo merecían mis historias.

Finalmente, tenía muchas historias con nombres de canciones, canciones que eran emblemáticas para mi, que eran parte de mi vida y expresaban simplemente muchas cosas de mi vida o que nada más me hacían identificarme.

Entonces, recordando todo el antecedente musical que había en mí y todo el antecedente de letras y tratando de hacer gala de mi creatividad, decidí crear un recopilatorio de relatos que uniera las maravillas de la música, en letras…

La elección era más que evidente, Cancionero era algo que de alguna u otra manera me acompaño en al menos 85% de mi vida y que además, era la amalgama perfecta de letras y música…

Un cancionero es eso finalmente, una memoria en letras de la música, una recopilación de historias que son narradas con música, lo más cercano a los antiguos bardos.

Mi meta, es que mi cancionero se vuelva algo así, una infinidad de historias que habrán llegado para quedarse en la mente o corazones de los demás, que sean capaces de tocar las fibras más sensibles y con suerte, trascender.

Espero que lo esté haciendo bien, no sé que opinen mis lectores (pocos, pero fieles) y amigos.

En fin ¿Algo que decir? Un comentario, créanlo, podría hacer la diferencia.