Lirica libre, el lugar de las letras de un escritor novel que día a día, trata de ser mejor...

Esta es la historia de un hombre que continua luchando contra su destino... Y confia en que vencera.

domingo, 1 de abril de 2012

Amiguitos

El primero de treinta días: Tu(s) mejor(es) amigo(s)



Amiguitos.



Hace un tiempo hablaba de mis dos mejores amigos, esos compinches de aventuras de años. Hablo de una amistad que lleva ya unos 10 años por lo menos y ajustándonos a estrictos patrones de medición de tiempo.

Esta ocasión hablare de otros grandes amigos y compañeros de viaje en este jolgorio que llamamos vida. Mis "amiguitos" del bachillerato. Amigos con los que llevo al menos de conocer, de aguantarnos de cagarnos de risa, de empedarnos y apoyarnos por lo menos (ajustándome a estrictos patrones de medición de tiempo y haciendo algoritmos que rebasan lo absurdo) 6 años (y estoy malbaratando al tiempo transcurrido).

La palabrita es de mi amigo Emmanuel, el nos decía a todos (los que me imagino él considera sus amigos, de verdad) amiguitos. Me gusto y me quede con el término. Normalmente acostumbrado a decirle guey a todos o amigo nada más (pero de la manera falsa y asquerosa en que le dices karnal a un desconocido o tratas de ligarte a una morra sonando kul y diciéndole amiga cuando no sabes que pedo con ella), era revitalizante poder decirle de otro modo a mis amigos.

Con el tiempo a cada amigo adquirió un seudónimo distinto. A mi amigo Germán le empecé a decir hijo (por el ese juego de calo mexicanísimo de que en algunos barrios así se hablan los valedores), Arturo se gano el titulo (al igual que yo) de papi para mofarnos descaradamente de un intrascendente miembro del grupo, al buen y extraño Humberto le decía hermano o mi sangre (y no sabría decir porque honestamente) y claro a mi amigo Emmanuel le respete su ingenio y le deje el titulo de amiguito. A su vez, cada uno de mis amigos se refería a mí con el mismo apodillo que el tuviera.

Que ellos sean mis amiguitos no es como si dijera que son pendejitos, cualquier cosita o que me valen verguita. Nada más alejado de la realidad. Son gente que de una u otra manera influyo en mi vida y que son importantes o lo fueron en su merecido momento.

Son esos amigos con los que hablas de mamadas aunque tenga años que no los has visto, que el debate sobre un tema trascedente se vuelve importante y que no importa el tiempo que haya pasado o que tanto nos dejemos de lado, de uno u otro modo las risas acuden a nuestro encuentro, los buenos recuerdos y la añoranza de otros tiempos que fueron buenos.

Esos son mis amiguitos. Compartimos sueños en algún momento. Nos sujetamos con fuerza en momentos en que sentimos que flaqueamos o requeríamos ayuda. Fuimos participes de varias aventuras y desaventuras. Crecimos inyectando un poco de nosotros en los demás, no por parasitismo o emular, sino por costumbre y convicción. Y no podría dejar de señalar lo más importante: Fuimos, somos y espero sigamos siendo, peregrinos (que más que eso, los considero de mi sangre, como mis hermanos) de este ajetreado y bello camino al que le decimos, burda y llanamente, vida.

Me han enseñado muchas cosas, yo les enseñe a su vez otras cosas. Existe respeto y un cariño que la gente llama para no complicarse amistad. Esos somos, o al menos son para mí, son mis amigos.

Que el tiempo, las obligaciones otras actividades o hasta la pereza nos han alejado, pues sí, es innegable que somos humanos y tendemos a olvidar y minimizar las prioridades por vánales factores secundarios, está en nuestra naturaleza.

Pero a mí me han demostrado que, como decía una vieja frase "los amigos son como la sangre, ante la herida acuden sin ser llamados". Y así es, en los momentos de necesidad y de dar una mano franca, me he sentido apoyado (y creo que en sana medida he hecho lo propio) y más importante que eso. Me he sentido querido y valorado.

La gente hablara de las riquezas del dinero, de las delicias del poder, del irresistible rose de la carne, de la perversa alegría de mancillar a otro e incluso de lo exquisito que es poder tenerlo todo.
La gente vendrá a contar historias, pero para mí, pocos sentimientos me han hecho sentir y tan pleno, como lo que experimento con mis "obligados" "amiguitos" mis "brodis" y mi liga de amigos extraordinarios… y variopintos.

Son de lo mejor, no sé qué sería de mi vida sin mis amiguitos. De una u otra forma son gente especial que entro a mi vida y es genial. No sabría explicarlo, pero sé que, seguiremos siendo amigos, que nuestros hijos se conocerán y que en algún momento raro y genial de la vida, mis hijos les dirán "tío" y sus hijos harán lo mismo conmigo.

En fin, soñar no cuesta nada, pero lo maravilloso es que esto no es un sueño, solo es un vistazo a un futuro que ya no esta tan distante como yo pensaba y me gusta, de muchas maneras.

Mis amiguitos, son geniales, espero que algún día, cuando yo sea grande y sea un hombre curtido en la vida, el trabajo, el deber y esas ondas, yo pueda ser un poco más como ellos, pero nada más tantito, solo las cosas buenas.

Gracias por estar siempre para mí, por saber interpretar mis silenciosos, por tener la confianza para compartirme sus ideas e incluso por tener de una manera rara y retorcida algo de respeto, por cuidarme cuando he sido imprudente y por hacerme crecer y madurar. Gracias por esta amistad amiguitos, por estos años de aventuras, de apoyo y carcajadas. Y claro, de antemano les agradezco por los años que vienen, que son bastantes, algunos a todo ese cumulo de años que nos esperan, suelen llamarle, burda y llanamente, vida.

Bueno ya dio comienzo este asunto, ya no pueden huir, solo es queda comentar y compartir sus experiencias amiguitos y amiguitas

Mis mejores amigos de la preparatoria. Pude quemar el texto narrando historias clasicas de la prepa, bochornosas y jocosas aventuras de universidad o emoticas e interesantes anecdotas de la vida de jovenes adultos... pero preferi dejar de lado eso y hablar de estos tipejos, personas importantes de mi vida.

La prueba viviente de que si existe una manera en que Dios nos bendice (o buda, o el universo, o la ciencia o en lo que creas), es que nos da amigos. En mi caso esos regalitos de la vida son mis amiguitos.

Arrancamos con un aire positivo y amistoso, es el calentamiento y viene con todo

2 comentarios:

  1. Vaya, que genial y largo tema para conversar. Me encanta el hecho de que no te vas a lo "emocional" sino simplemente a hablar de lo que son para ti tus mejores amigos y ya.
    Y como siempre "A un verdadero amigo, aunque hayan estado separados meses, se saludan como si se hubieran visto el dia anterior" o algo asi, no recuerdo bien.
    Sigamos, sigamos! mi querido kaikai.

    ResponderEliminar
  2. Si de hecho yo doy fe y legalidad de esa frase, la firmo ante notario y me empedo para aseverarlo (se que no seria necesario lo ultimo, pero por el puro antoho lo hago XD).

    Gracias por leer mi estimada kamokat...

    Y como dirian en una de esas rolas de rammstein

    ¡Adelante amigos! O.Ó

    ResponderEliminar

Me interesa tú opinión.