Lirica libre, el lugar de las letras de un escritor novel que día a día, trata de ser mejor...

Esta es la historia de un hombre que continua luchando contra su destino... Y confia en que vencera.

sábado, 21 de mayo de 2011

De miedos, enseñanzas, valentía y valía.

19vo día lo que te causa más temor


De miedos, enseñanzas, valentía y valía.



Este es un tema muy difícil para mí. No porque me traiga a la mente traumas o pendejadas así, la verdad es que he aprendido a vivir con esas malas experiencias. Tampoco se debe a que hoy no pegue ojo al dormir, porque aunque si me da miedo lo que nombrare a continuación, no me quita ya el sueño (al menos no diario). Finalmente, tampoco se trata de que tema (vaya ironía) mostrarme vulnerable ante nadie, todos tenemos miedos, debilidades y demás maravillas, así que no se me complica por eso el tema.

El problema radica única y exclusivamente en que yo le temo a muchísimas cosas, es más, si alguien se atreviera a verme a los ojos y decirme abiertamente que cree que soy un cobarde o alguien carente de valor… una parte de mí estaría tentada a darle la razón. Es importante hacer hincapié, en que una parte nada más y solo UNA, creería que mi interlocutor estaría en lo cierto.

Empezare pues, a enumerar las razones por las que una parte de mi creería que soy un cobarde, un sin huevos, que no tiene remedio.

A morir joven… o bueno, a cualquier edad, morir hace que me quede despierto en las noches. Solo pensar que mi vida se acabara, que dejare de existir, que ya no habrá más yo… me hace sentir que el mundo se me viene abajo. Yo se que algún día moriré, pero espero que tarde mucho en pasar. Y no importa que sea natural, que a todos nos pase, que sea la única certeza de la vida, ni que yo haya estado ya a punto de morir…simplemente no me agrada la idea. Para lo único que me sirve este miedo es para valorar la vida.

La soledad. No podría soportarlo, simplemente me volvería loco si quedara abandonado en una isla desierta o mierdas del estilo, no lo aguantaría. Podría soportar eso de estar rodeado de gente y sentirme solo, pero no el estar real y absolutamente solo. Esta tontería de temor solo sirve para que valore más la compañía.

Perder a mis padres. No lo necesito explicar realmente, me aterra, sé que es natural y lo sobrellevo mejor que mi temor a que yo muera (si lo sé, soy un egoísta de mierda) pero de cualquier forma, solo de pensar que algún día no estará mi papá para darme un sabio consejo o contarme un buen chiste, o mi mamá para decirme cuanto me quiere o que me diga que hoy aprendió algo nuevo… simplemente me partiría el alma. Sobra decir que este temor hace que los quiera y valore más.

Que me abandonen mis amigos, mi novia, mis hermanas o algún familiar cercano me parece la mayor putada que puede hacer la vida/el destino/el azar/el dado mágico en mi contra. Esto también ya me ha pasado y no por eso lo acepto o digo “bueno, suele pasar”. Me da miedo y me enoja solo de pensarlo. Esto no me ha enseñado nada bueno, yo siempre he valorado a un buen amigo, lo único que me ha enseñado es que a veces las cosas que pasan son una mierda.

No poder defenderme y sentirme débil y desprotegido. Esto es una cosa aparte. Nunca fui un guerrero de sangre o uno de esos peleadores legendarios, pero soy sincero, mi lado antisocial gustaba de pelearse, de esperar una provocación para tener problemas e incluso de hacer vandalismo… y ahora, no tengo una buena capacidad de reacción ni física ni emocional para una eventualidad de este tipo. La única lección que he tenido de aquí, es que ahora debo ser más precavido, como por tres personas.

Que no se cumplan mis sueños. Este es simple, me da miedo, pero aun tengo tiempo no solo para remediar o tratar con un posible problema, sino que además, echándole un poquito de ganas, hasta puedo hacer mejores cosas de las que he soñado.

Sufrir alguna discapacidad. La verdad la mayoría me tienen sin cuidado, menos tal vez que me rebanen un brazo, una pierna y quedarme ciego. Sé que subestimo hasta cosas tan simples como el tacto de la palma de mis pies o el tener 5 dedos en cada mano, nada se compara a estar lo más completo que se pueda. Claro, valoro mi cuerpo, hoy más que nunca.

Ahora bien, resalte que solo una parte de mi cree que soy un cobarde, porque tengo claro que para ser valiente, no es que no debas temerle a nada, por el contrario, ser valiente radica simple y llanamente en superar tus miedos. Mi lista era más larga hace un año, y hace dos y hace tres y etc… pero deje de temerle a otras cosas, así que creo que me he ganado el título de “humano valiente”; después de todo es parte de la naturaleza humana tener miedo… y también es parte de la naturaleza humana superar esos miedos y seguir adelante.


Claramente, este es mi caso como el de muchos.



De la verga, esto era el escrito de ayer viernes. Mil disculpas por mis excesos y estos detalles que bien podemos llamar fallas.

Ahora bueno el escrito habla en verdad por si mismo. Solo quiero hacer notar un ar de cosas.

Esta es la parte mas profunda de mi ser, de lo que esta dentro de mis entrañas, lo que va navegando el oceano de mi alma: mis temores mas cabrones; el valor para superarlos, las lecciones que me han dado estos miedos y el entendimiento y sabiduria que en mi han generado.

Como dato curioso uno, le di ese doble de srer un temor y un valor o leccion, para yo mismo hacerme consciente de que hasta esas cosas "malas" tienen su razon de ser.

El dato curioso dos es que el titulo original "De miedos, enseñanzas, valentía y valía." no incluia valia. He visto muchos titulos que empiezan con el "De..." para referirse a que se habla agrandes rasgos de unn tema. El que lleve miedo es evidente, el que diga enseñanzas es el lado que explicaba antes, el valor es por aftontar esos miedos, pero.... decidi ponerle valia porque esos miedos, y esa enseñanza que he aprendido de ellos, han generado una mayor valia en esas cosas que me da miedo perder.

Gracias por leer mis mas grandes miedos y entenderme y verme aun mas humano de lo que ya de por si soy XD

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me interesa tú opinión.